Estados Unidos

Alibaba sube en bolsa gracias a sus chips de inteligencia artificial

Compartir
Compartir

Las acciones de Alibaba vivieron un repunte significativo después de que se confirmara que China Unicom, el segundo mayor operador de telecomunicaciones del país, incorporará los chips de inteligencia artificial desarrollados por la división de semiconductores de la compañía, conocida como Pingtouge o T-Head. La operación, divulgada inicialmente por la cadena estatal CCTV, supone un espaldarazo a la estrategia de Alibaba de consolidarse como un actor relevante en la carrera de la computación avanzada y la inteligencia artificial.

El acuerdo se enmarca en la construcción de un nuevo centro de datos de gran escala en la provincia de Qinghai, donde los chips de Alibaba compartirán espacio con los de otros fabricantes locales como MetaX y Biren Technology. Más allá del volumen de la operación, el anuncio llega en un momento delicado: Estados Unidos ha restringido la exportación de semiconductores de alto rendimiento a China, y el regulador de internet del país habría ordenado a varias empresas dejar de adquirir determinados procesadores de Nvidia. Este telón de fondo convierte la decisión de China Unicom en un gesto estratégico que refuerza la apuesta de Pekín por reducir su dependencia de proveedores extranjeros.

Un impulso para el negocio de la nube y la soberanía tecnológica de China

El negocio de chips no es un producto de venta directa en Alibaba. En realidad, la compañía ofrece acceso a la potencia de cálculo de sus semiconductores a través de su división de servicios en la nube, uno de los pilares de crecimiento de la firma. Esto implica que cada despliegue de sus aceleradores supone, en paralelo, una expansión del ecosistema cloud de la empresa. En este caso, China Unicom no solo adquiere capacidad de procesamiento, sino que refuerza un entramado tecnológico doméstico que busca ser competitivo en un terreno dominado hasta ahora por gigantes estadounidenses.

Para Alibaba, el acuerdo es también una validación de sus esfuerzos en el campo de la inteligencia artificial. La compañía ha invertido en el desarrollo de modelos propios y, al mismo tiempo, está en proceso de diseñar una nueva generación de chips especializados en IA. Aunque no está claro si China Unicom utilizará la versión más reciente de estos procesadores, la visibilidad pública del acuerdo —difundida incluso en vallas publicitarias del centro de datos de Sanjiangyuan— refuerza la percepción de que Alibaba no es únicamente un titán del comercio electrónico, sino un jugador tecnológico integral con ambiciones de largo alcance.

Un mercado en transformación acelerada

La reacción bursátil fue inmediata: las acciones de Alibaba cerraron con una subida superior al 5% en Hong Kong, mientras que sus títulos en Wall Street avanzaban más de un 2% en operaciones previas a la apertura. La señal que leen los inversores es clara: en un mercado presionado por tensiones regulatorias y geopolíticas, cualquier paso hacia la consolidación de la cadena de suministro local se traduce en confianza hacia las compañías chinas mejor posicionadas.

Al mismo tiempo, la noticia pone de relieve la nueva geografía de la innovación en chips. El veto estadounidense a Nvidia abre un espacio que empresas como Alibaba, MetaX o Biren están decididas a ocupar. Aunque todavía queda camino para alcanzar los estándares internacionales en rendimiento y eficiencia, la colaboración con grandes operadores nacionales como China Unicom actúa como catalizador.

La pregunta que se abre es si estas alianzas domésticas bastarán para reducir la brecha tecnológica con Occidente o si, por el contrario, el bloqueo de acceso a los chips más avanzados prolongará el desfase. Lo que parece indiscutible es que Alibaba ha dado un paso más para convertirse en un pilar de la soberanía digital de China.

Compartir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *